LA FOTOGRAFÍA

Estaba sentado con mucha gente a su alrededor, pero él tenía puesta su atención en algo en particular.

El fotógrafo trataba hacer que él captara su atención al foco de la cámara y finalmente tomar la fotografía, mas él, observaba detenidamente la figura femenina que paseaba frente a él, esperando el turno para fotografiarse.

Aún pensaba en la noche anterior, cuando ella yacía dormida entre sus brazos. No podía esperar a la noche para sentirla otra vez a su lado.

Inquieto, se levantó de su asiento. El fotógrafo enojado, le pidió regresara a su lugar para tomar la fotografía. Hizo tanto escándalo, que llamó la atención de ella, que entre risitas cruzó una mirada con él y después una breve sonrisa de complicidad provocó en él la alegría de saber que lo observaba.

No había tiempo que perder. Se colocó como el fotógrafo indicaba, esperó la luz del flash que dejó una estela de humo que le hizo toser y fue hacia ella para tomarla de la cintura y besar sus labios.

Con una sonrisa en la boca, se apartó de él y fue hacia donde estaba el fotógrafo. Coqueta, posó como se le indicó y tras el flash, fue hacia él para abrazarlo.

A él, no le importaba quedar inmortalizado en una fotografía, pero si verla a ella feliz por las fotografías que acababan de tomarse.